En el sexenio del ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa, el 24 de julio del 2008, se decretó la promulgación de la ley para el fomento a la lectura y el libro, una de las líneas principales además del precio único, está en crear acciones permanentes de impulso a la lectura a través de la red de bibliotecas públicas y salas de lectura, así como de bibliotecas escolares, de aula y dotación de acervos. 1
Publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF), esta ley hubo de sufrir un proceso para su aprobación que incluyó tres años de gestiones y la oposición de parte del sector de libreros, sin embargo también ha generado un acuerdo ampliamente mayoritario entre editores, partidos políticos, artistas, escritores e intelectuales de diferentes posturas políticas.
Es importante resaltar a muy grande rasgo que esta ley es de orden público, de interés social y se aplicará en todo el territorio nacional. Es una confirmación para la libertad que todo mexicano tiene para escribir, editar y publicar libros sobre cualquier materia y por supuesto hay plena libertad de lectura, promoción o difusión de libros.
¿Y quién está a cargo de esta ley?
Esta ley está a cargo la Secretaría de Educación Pública, el Consejo Nacional para las Cultura y las Artes (CONACULTA), los gobiernos estales, municipales y el Consejo Nacional de Fomento para el Libro y la Lectura.
El beneficio primordial que se busca es la igualdad social a la hora de comprar un libro, que todos tengamos a nuestro alcance lecturas que podamos utilizar para nuestro crecimiento personal. Y sin lugar a duda, la única manera en la que esta ley traiga tantos beneficios es creando lectores, que son los únicos que podrán hacer que estas nuevas disposiciones se logren y sean para el beneficio de todos.
La política del precio único no consiste en que todos los libros cuesten lo mismo, si no que un libro tenga el mismo precio de venta al público en cualquier parte del territorio nacional. El editor es quien fija liberadamente el precio. Dicha política no es únicamente en México, a nivel internacional el primer país que adoptó el precio único fue Dinamarca en 1837. Actualmente diversos países lo aplican, entre ellos está, Alemania, Argentina, Austria, España y Japón, entre otros.
La ley de fomento a la lectura y el libro, busca fomentar la lectura entre los mexicanos y estimular a las pequeñas librerías que se ven despojadas por las grandes empresas al ofrecer un precio más bajo por la gran demanda.
1 Rodríguez Barba Fabiola. Una década de debate: La ley para fomento de la lectura y el libro en México en perspectiva comparada, vol. 11 núm. 23, diciembre 2008, pp. 248-264. Universidad Autónoma del Estado de México.